El hotel está ubicado en una zona conveniente, cerca de varias atracciones turísticas como las montañas y un supermercado. La habitación era cómoda y espaciosa, con muebles adecuados. El personal era amable y servicial.

El desayuno era bastante básico y podría mejorar en términos de calidad y variedad.

Esta fue una agradable sorpresa en términos de relación calidad-precio. El hotel está bien ubicado, cerca del fuerte de Bahla y de la carretera principal, lo que facilita mucho el acceso. Las habitaciones son espaciosas y cuentan con grandes ventanales que permiten una luz natural encantadora. La cama era enorme y muy cómoda, lo cual aseguró un buen descanso durante mi estancia. Además, el desayuno incluido en la tarifa era variado y delicioso, con diferentes opciones de comida que satisfacieron mis gustos culinarios.

Todo estuvo bien, sin ningún problema.